LAS 4 PASTELERÍAS CON MÁS

SOLERA DE LA CAPITAL

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No es ninguna sorpresa que en la capital vizcaína, ir de pintxos es un must. Tanto turistas como locales disfrutamos con un buen poteo bien para hacer un descanso de la rutina diaria como los fines de semana. Pero lo que tal vez menos gente conoce es que hay un Bilbao tan dulce que incluso tiene sus propios pasteles. Los que son de aquí, del botxo, y que ni siquiera se encuentran en las vecinas Donostia-San Sebastián o Vitoria-Gasteiz.

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Las Carolinas, los bollos de mantequilla o los pasteles de arroz son algunos de los bocados dulces que podrás encontrar en bares, cafeterías y, cómo no, en estas clásicas pastelerías. Las de toda la vida. Las que siguen poniendo el toque dulce a toda visita que se precie en Bilbao.

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Si nos quedan ganas de dulce tras el desayuno en nuestro hotel en Bilbao, podemos bajar dando un paseo hasta el centro. Porque en plena Gran Vía bilbaína nos toparemos con la más golosa institución: Arrese. Esta pastelería ha sabido adaptarse a los tiempos y cuenta con diversos establecimientos por toda la ciudad. Pero nosotros iremos a la de toda la vida. Más de 160 años lleva ya abriendo sus puertas este local que conserva intacta su solera. Porque mantiene intacta su decoración, sus mostradores de mármol, sus columnas…nada parece alterado en el tiempo. Por eso tal vez sus recetas siguen recordándonos a los dulces que compraban allí nuestras abuelas. Aunque no hay zona de degustación, su tienda de la calle Berástegui tiene cafetería, así que un buen café o chocolate caliente con un bollo de mantequilla allí mismo.

Foto: web de Arrese

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No te vayas sin probar: Costará decidirse entre tanta exquisitez, pero sus trufas son reconocidas por todos los bilbaínos y bilbaínas. Un clásico tanto para regalar como para darse un capricho.

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Otro templo del golosismo tradicional lo encontramos en Martina de Zuricalday. Además de una cuidada selección de todo tipo de pasteles y dulces, nos va a encantar su decoración. Todo en estas pastelerías (fundada en 1830 y con 4 establecimientos en Bilbao) invita a olvidarnos de la operación bikini por unos momentos. Siendo la pastelería más antigua de Bilbao, ¡algo sabrán de dulces!

Foto Instagram de Martina de Zuricalday

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Sus tonos pastel de la decoración no pueden ir más a juego con el escaparate que nos espera. El cielo de los pasteles en la tierra. Los instagramers tienen buena selección de rincones para fotografiar.

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No te vayas sin probar: Los macarons. De todos los colores. Prepárate un buen arcoíris dulce, aunque es probable que no resistas a la tentación de comerlos antes de llegar a casa.

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Urrestarazu es otro de los clásicos que no debemos dejar pasar por alto en nuestra visita a Bilbao. Además de pasteles y bombones, nos van a llamar la atención sus helados artesanos. Desde 1972 llevan poniendo el toque dulce a todo Bilbao ni más ni menos.  En estas típicas pastelerías bilbaínas podrás incluso hacer pedidos online.

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Otro de los establecimientos de toda la vida casi en Bilbao y alrededores. Una excelente manera de dar descanso a nuestros pies tras un intenso día de turismo por Bilbao. En Urrestarazu podemos hacer un pequeño parón para tomarnos la merienda más dulce. Café, chocolates, infusiones acompañadas de sus clásicas pastas de té.

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No te vayas sin probar: su pastel de arroz, otro clásico exclusivo de la capital. Y que, pese a su nombre, no contiene ni un grano de arroz. Se llaman así porque antaño se usaba harina de arroz para su elaboración. Actualmente se hacen con harina de trigo, pero se sigue  manteniendo el nombre.

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Desde los años 60 hasta ahora, la Pastelería Suiza de Bilbao nos ha puesto los dientes largos al pasar por su escaparate. Tartas, pasteles, pastas se suman a una completa carta dulce donde los bocados que comemos en fechas especiales, como carnavales, semana santa etc se dan cita. Pese a haber reformado en varias ocasiones el local, tanto la ubicación de la tienda como del propio obrador, no se han movido nunca.  Sí que han modificado en varias ocasiones su decoración, pero no han variado ni un gramo sus recetas que les han convertido en referentes del dulce. Sus croissants de almendra sorprenderían hasta los más puristas franceses.

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No te vayas sin probar: Las Carolinas. Será fácil que se nos haga la boca agua antes incluso de entrar, porque raro es el día que no las encontremos expuestas en el escaparate. Un verdadero ejemplo del nivel de golosismo bilbaíno a través de otro de los pasteles exclusivos del botxo.

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Aunque si nuestra estancia en Bilbao no nos permite acercarnos a ninguna de ellas, seguro que satisfacemos nuestro antojo de dulce en el amplio buffet de desayuno y carta de postres del Hotel Gran Bilbao. Para que te lleves un dulce recuerdo en la memoria gustativa.

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